La aprehensión de tres personas que hizo personal de la Agencia de Investigación Criminal, el pasado viernes 5 de mayo, fue calificada por un Juez Especializado de Control, como: ilegal.

Como se recordará, el mediodía del viernes, un grupo de agentes protagonizó un enfrentamiento con personas armadas que viajaban en motocicletas sobre la calle Matamoros, de la colonia Lagunilla de Cuernavaca.

A través de un comunicado de prensa, la Fiscalía General de Justicia (FGJ) del estado, informó que resultado del hecho violento, dos personas fueron muertas, una resultó herida, y posteriormente tres hombres fueron detenidos.

Se trata de Oscar Omar, Juan Manuel y Tomas, quienes fueron presentados ante el Juez Especializado de Control, Edie Sandoval Lome.

En la audiencia de control de detención, el Agente del Ministerio Público dijo que las tres personas habían sido detenidas por delitos contra la salud, ya que tenían en posesión bolsitas de droga conocida como “cristal”.

Según la versión oficial, alrededor de las 12:15 horas, los agentes realizaban un patrullaje en las inmediaciones de la colonia, antes referida, pues minutos antes sus compañeros sostuvieron un enfrentamiento con personas armadas.

Los agentes, a través del altavoz, ordenaron a dos de ellos, descender de las motos que se encontraban estacionadas, pero se habrían negado por lo que fueron sometidos y al revisarlos les encontraron en posesión de dosis de cristal.

El tercer detenido, identificado con el nombre de Tomas, observó el actuar de los agentes y con un cuchillo los amagó para que dejaran en libertad a sus amigos, según narraron los agentes aprehensores.

Pero los abogados defensores de las personas detenidas argumentaron que el informe de los agentes era ilógico y oscuro ya que el acto de molestia nunca fue claro.

Las personas no fueron detenidas en flagrancia, ni tampoco fueron identificados, por algún agente, como partícipes del enfrentamiento porque ninguno de ellos fue testigo, sólo porque viajaban en una moto fueron detenidos.

Al resolver, el juzgador comentó: “Ni ellos mismos sabían a quiénes estaban buscando”; los agentes se toparon con ellos de casualidad y porque viajaban en moto, fueron aprehendidos. Por eso calificó de ilegal, la detención.