La Fiscalía Anticorrupción ejecutó este miércoles una orden de aprehensión contra Sarahí Juallek Villalobos, exjueza interina del Tribunal Superior de Justicia (TSJ) de Morelos y actual asesora de la Magistrada María Luisa Sánchez Osorio.

La detención, ocurrida en Cuernavaca, señala posibles delitos de tráfico de influencias y ejercicio indebido del servicio público, mientras el cateo de su domicilio en Jiutepec arroja nuevos hallazgos que complican aún más el caso.

Agentes de Investigación Criminal, adscritos a la Fiscalía Especializada en Combate a la Corrupción (FECC), catearon la tarde del 27 de noviembre el domicilio de Juallek Villalobos, ubicado en la colonia Deportiva de Tejalpa, Jiutepec.

Durante el operativo, se encontró un expediente numerado como 168/2024-1, relacionado con una demanda ejecutivo mercantil interpuesta por Crheart Business Group, S.A. de C.V. contra Gabriel Reyes Salgado, en la que se exige el pago de 950 millones de pesos.

Según una fuente consultada por El Guardián Mx, este caso habría sido conocido previamente por Juallek Villalobos durante su periodo como jueza interina.

Asimismo, trascendió el hallazgo de otros expedientes pertenecientes a la Sala de la Magistrada María Luisa Sánchez Osorio, además de denuncias y demandas dirigidas contra el Magistrado Presidente, Luis Jorge Gamboa Olea, y presentadas ante la Comisión de Derechos Humanos de Morelos.

Sarahí Juallek Villalobos fue aprehendida la mañana del miércoles y será presentada este jueves ante el juez de la causa en una audiencia programada en la Ciudad Judicial de Jojutla.

Hasta el momento, ni la Magistrada Sánchez Osorio ni el Tribunal Superior de Justicia han emitido un comunicado oficial respecto al caso.

Este nuevo escándalo en el sistema judicial de Morelos no solo pone en evidencia la posible red de corrupción que involucra a altos funcionarios, sino que también profundiza la crisis de credibilidad de las instituciones encargadas de impartir justicia.

La detención de Juallek Villalobos y los documentos hallados en su domicilio podrían abrir la puerta a nuevas investigaciones que comprometan a otras figuras clave del poder judicial en Morelos.