En una jornada marcada por acusaciones, reclamos, activación de la alerta sísmica y un insólito apagón, magistradas y magistrados del Tribunal Superior de Justicia (TSJ) de Morelos destituyeron a Luis Jorge Gamboa Olea como presidente y designaron en su lugar a Juan Gabriel Vargas Téllez.
La sesión ordinaria, programada para iniciar puntualmente a las 8:00 horas, se retrasó más de media hora con la asistencia de apenas 15 de los 22 magistrados que integran el Pleno.
Desde el arranque, la tensión fue evidente cuando Vargas Téllez solicitó modificar la orden del día para incluir puntos cruciales relacionados con la remoción de los representantes de jueces y magistrados en la Junta de Administración, Vigilancia y Disciplina.
La polémica escaló cuando la Magistrada María Luisa Sánchez Osorio confrontó directamente a Gamboa, acusándolo públicamente de misoginia y de incumplir con sus obligaciones legales.
“Respete a las mujeres, deje de ser misógino, respete a las magistradas, a las juezas, a las secretarias de acuerdo (…) respéteme y cumpla con la ley”, exigió Sánchez Osorio, en una escena pocas veces vista en el TSJ.
La situación se salió de control al desatarse una serie de reclamos contra el desempeño del entonces presidente Gamboa Olea. En su defensa, el magistrado acusó a sus opositores de actuar por intereses políticos y cuestionó la validez de la sesión al asegurar que solo había 13 magistrados presentes, cifra que difería del conteo inicial.
La crisis alcanzó su punto más extraño cuando, inesperadamente, se interrumpió la transmisión pública de la sesión. Acto seguido, Gamboa Olea abandonó precipitadamente la sala, momento en el cual también fueron suspendidos los servicios de internet y se activó la alerta sísmica, y finalmente, el suministro eléctrico.
En medio de la oscuridad y apoyados con lámparas de teléfonos celulares, los magistrados continuaron la sesión. En esas condiciones extraordinarias, por unanimidad destituyeron a Gamboa y eligieron a Juan Gabriel Vargas Téllez como nuevo presidente del TSJ.