José de Jesús Zavala Valdés, recientemente nombrado director operativo de los centros penitenciarios del estado de Morelos, enfrenta serias acusaciones que cuestionan su trayectoria profesional.
Durante su gestión como Comisionado de Custodia Penitenciaria en el Centro Regional de Reinserción Social Varonil de Cieneguillas, Zacatecas, fue denunciado públicamente por sus propios subordinados.
De acuerdo con publicaciones de los diarios “El Sol de Zacatecas” y “La Jornada”, del domingo 19 de diciembre de 2021, personal de seguridad y custodia del penal de Cieneguillas bloqueó el acceso principal del centro penitenciario como medida de protesta, exigiendo la intervención de las autoridades estatales.
Los manifestantes solicitaron en ese momento la presencia de Adolfo Marín, secretario de Seguridad Pública del Estado, quien llegó al lugar alrededor de las dos de la tarde para dialogar con los inconformes.
Entre los acuerdos alcanzados tras la protesta, destacó el compromiso del pago de un adeudo correspondiente al aguinaldo, calculado en aproximadamente 10 mil pesos por agente.
Sin embargo, otro de los puntos clave fue la exigencia de la renuncia de Zavala Valdés, entonces Comisionado de Custodia Penitenciaria, y la de cuatro de sus subalternos, a quienes se acusó de conductas abusivas.
Según lo informado, los oficiales denunciaron que un compañero había sido golpeado por el propio Zavala Valdés el día anterior, una práctica que, según los custodios, no era aislada. También señalaron que estas agresiones se extendían a las personas privadas de su libertad, quienes sufrían un trato denigrante.
Por otro lado, su reciente designación en Morelos no ha estado exenta de críticas. Familiares de internos y algunas personas internas han señalado que el funcionario no ha atendido adecuadamente las necesidades básicas de los centros penitenciarios, como la reparación de sistemas de drenaje o la dotación de medicamentos esenciales.
En contraste, algunos lo han señalado como un funcionario que escucha y atiende los asuntos relacionados con el funcionamiento penitenciario, aunque no han faltado acusaciones de negligencia.
“Los drenajes están colapsados y nadie hace nada. Él (Zavala Valdés) no soluciona el problema; se la pasa con las secretarias en lugar de atender las necesidades del penal. Es urgente resolver esta situación y otros problemas, como la falta de medicamentos”, expresó una persona privada de libertad.
La clave operativa de Zavala Valdés, «Vulcano», ha sido tema de controversia en ambas entidades, lo que levanta preguntas sobre su idoneidad para dirigir un sistema tan delicado como el de los centros penitenciarios en Morelos.