Desde enero de 2017, la Secretaría de la Defensa Nacional (SEDENA) mantiene un registro sobre la presencia en Morelos del Cártel Jalisco Nueva Generación (CJNG) revela un documento oficial de inteligencia militar.
El informe confidencial titulado: “Panorama CJNG 30 de JUN. 2017”, es uno de los millones de correos electrónicos hackeados por el grupo Guacamaya.
El Cártel Jalisco opera desde hace más de 5 años en el estado. Los indicios son mensajes que comenzaron a aparecer en mantas y cartulinas, especialmente en municipios de la zona metropolitana, menciona el informe de inteligencia.
Lo anterior como consecuencia de la debilidad del poder operativo del grupo de “Los Rojos, en los municipios de Cuernavaca, Jiutepec, Cuautla, Yautepec, Tlaltizapán, Emiliano Zapata y Ciudad Ayala”, dice el documento.
Pero el CJNG no había realizado acciones evidentes y abiertas que confirmaran su presencia, hasta mediados del pasado mes de octubre, cuando aparecieron videos de amenazas en la región oriente del estado.
Hasta ese entonces, el Ejército sólo conocía que personas originarias de Jalisco, Guerrero y Estado de México eran contratadas para realizar ejecuciones y extorsiones en Morelos.
El video más reciente, difundido el pasado 8 de noviembre, es un comunicado que un comando armado dirige en contra del grupo de “Los Acapulqueños”, que dirige José Antonio Alvarado Martínez, alias “La Vara” de Guerreros Unidos.
“Este comunicado va para todo Morelos en general. Todos estamos artos acapulqueños hijos de su puta madre, esta vez se metieron en donde no debían. A chingar a su puta madre, tiene 12 horas para salirse de todos los municipios y del estado en general”, lee uno de los hombres armados.
El panorama se había pronosticado por inteligencia militar, ya que estableció en su momento que “de confirmarse la presencia del Cártel Jalisco Nueva Generación, se estima que la violencia en el estado de Morelos podría aumentar” porque se sumaría la disputa entre Los Rojos y Guerreros Unidos.
Hasta ahora el conflicto armado, entre grupos delictivos, ha dejado decenas de personas asesinadas y casos de personas desaparecidos en la zona oriente de Morelos. No existe una respuesta acertada de la autoridad por garantizar la seguridad a la población.