Carlos Quintero J.

Antonio Villalobos Adán, sentado en el “banquillo de los acusados”, miró fijamente al juez penal Isidoro Eddie Sandoval Lome.

Flanqueado a su derecha por su abogado y a su izquierda por el subsecretario de Protección Civil Gonzalo Barquín Granados, también coimputado, el Presidente de Cuernavaca escuchó atento.

“Para que les quede claro, señor Presidente, tengo que hacer una precisión: no existe una animadversión de este juzgador hacia ustedes”, dijo en tono serio.

“Sí”, respondió el alcalde en voz baja, apenas perceptible.

Era la audiencia de vinculación a proceso del martes 1 de diciembre. La diligencia, programada a las 8 de la mañana, se había prolongado hasta las tres de la tarde y Sandoval Lome daba a conocer su fallo.

En ese tiempo había escuchado las pruebas ofrecidas por la defensa: tres testigos y un peritaje en informática que no aportaron ningún dato útil para desvirtuar la imputación de la Fiscalía Anticorrupción.

“La defensa quiso utilizar a dichos testigos para ubicar al alcalde en otro lugar, declararon falsamente y se contradijeron”, expuso el juzgador.

Pero el resultado fue adverso, los testigos confirmaron que el alcalde sí estuvo presente en el tiempo y el sitio del hecho.

El juez criticó que la defensa no llamó a declarar a dos testigos claves del caso: Cristian y Alberto Contreras Luna, las dos víctimas.

“Ellos pudieron haber sido confrontados en su dicho. Estuvieron aquí, todo el tiempo, y no los utilizaron para su defensa”, expuso Sandoval Lome.

La actuación de las autoridades municipales fue ilógica para el juzgador. No se desempeñaron con respeto a la norma, ni los procedimientos establecidos para otorgar o negar permisos de funcionamiento, ni para clausurar establecimientos comerciales.

Los argumentos de los abogados defensores fueron desechados por el juez uno por uno y con una frase repetitiva: “para que les quede claro”.

Al final, Eddie Sandoval dicto auto de vinculación a proceso penal, por el delito de coecho, en contra del Presidente Municipal de Cuernavaca Antonio Villalobos Adán y del subsecretario de Protección Civil, Gonzalo Alberto Barquín Granados.

En ese momento, la Fiscal Anticorrupción Kenia Edrey Cortes solicitó al juez el cambio de la medida cautelar, al pedir la inhabilitación temporal de Villalobos Adán como alcalde.

Pero la petición le fue negada porque el ahora procesado, presentó un amparo indirecto para que el Juez no le impusiera un cambio en la medida cautelar y suspenderlo temporalmente.

Por consiguiente el juez confirmó que se trata de un mandato judicial y por lo tanto se encontraba imposibilitado para actuar y notificar de la resolución al Congreso del Estado para iniciar un proceso para la separación de su cargo.

Eddie Sandoval leyó algunos párrafos de la resolución cuestionable, emitida por el Juez del Juzgado Séptimo de Distrito en el Estado de Morelos para que la acción no se materializara ni se llevara a cabo.

Antes de concluir, la autoridad judicial fijo un plazo de tres meses para el cierre de la investigación mismo que vence el próximo 1 de marzo.